LA NO ALTERNATIVA DEL CIUDADANO DE A PIE

Tú y yo somos ciudadanos de a pie. No militamos en ningún partido político. Nos han quitado la escalera y estamos en el suelo, agarrados de la brocha con expresión de “¿ahora qué?” Salpicados de corrupción, cinismo e ineptitud de políticos con cargos públicos y políticos de la oposición, que no acaban de ponerse de acuerdo. Nuestra única alternativa parece ser: ¡sentarnos a llorar! La militarización del país hasta el 2028, está por aprobarse.

¿Qué sucede?

Qué la gran mayoría de los políticos de la oposición, igual que los de Morena, tienen enorme cola que les pisen. Para evitarse problemas, lo que incluye cárcel y pérdida patrimonial, traicionan a la disque unida oposición.

¿Tenemos políticos confiables? NO. Todos lo sabemos.

¿Los partidos políticos detentan el monopolio para presentar candidatos a cargos de elección? SI.

El Art. 35-II constitucional, establece que: “El derecho de solicitar el registro de candidatos y candidatas ante la autoridad electoral corresponde a los partidos políticos….”. Agrega la posibilidad de candidaturas independientes, y las sujeta a trabas, requisitos y términos, que no es lugar ni espacio para tratar, pero que fueron aprobados con celos por los partidos políticos representados en las cámaras, al aprobar la legislación electoral secundaria. La consecuencia es que las candidaturas independientes son casi imposibles de presentar. Como está la legislación electoral hoy, cualquier candidato que no tenga el cobijo de un partido político, esta práctica y electoralmente muerto (a).

¿Podemos constituir un partido político de ciudadanos de a pie, limpios y confiables, para participar en las próximas elecciones federales de 2023 y 2024? NO.

Esto se debe a que mañosamente, los partidos políticos representados en las cámaras, que aprobaron la Ley General de Partidos Políticos, establecieron como requisito en el Art. 11.1, que: “La organización de ciudadanos que pretenda constituirse en partido político…. [debe] informar tal propósito …. en el mes de enero del año siguiente al de la elección de Presidente de los Estados Unidos Mexicanos….”. En otras palabras, que la información de intención, para las próximas elecciones federales, sólo podrá presentarse durante el mes de enero de 2025, obviamente, después de que se hayan celebrado las elecciones de 2023 y 2024. Igual requisito y término se establece en caso de la constitución de partidos políticos locales en los Estados, salvo que la solicitud de intención debe presentarse ante el organismo público electoral local, correspondiente.

En la mañanera de hoy jueves 13 de octubre de 2022, en son de burla y obviamente para demostrar la desunión de la oposición, López Obrador presentó una lista de 42 posibles candidatos de la oposición. Su aparente propósito fue demostrar la división y contra restar la mala fama y graves desdoros que le han caído a sus “corcholatas” electorales, con motivo de la publicación del libro de Elena Chavez, “El Rey del Cash”. Podría ser además un mensaje de “te estoy milando”.

¿Qué puede hacer el ciudadano de a pie en las próximas elecciones de 2023 y 2024?

Únicamente, elegir el o los partidos políticos y candidatos por los cuales votar. También puede rezar. Lo que no debe hacer es dejar de expresar su voluntad, ejercitando su derecho ciudadano al voto.

Vivimos momentos de descomposición política. Nuestra patria, junto con Argentina, es uno de los dos países para-dictatoriales en Latinoamérica. López Obrador, “el hombre fuerte de México”, todavía debe sujetarse a elecciones democráticas, por lo que no puede ser considerado dictador. Si llegara a remover al INE, entonces sí, seremos dictadura, como es el caso de Cuba y Venezuela.

La pregunta en el aire es si nuestras ricas, poderosísimas y obedientes fuerzas armadas, llegado el caso, apoyarán a su Jefe Supremo. Sus altos mandos se están acostumbrando a abrigos de cashmere, como lo ha revelado el guacamayazo reciente; sin embargo, el ejército y la armada también se integra por quienes no requieren de cashmere y pueden anteponer principios y aprendizajes de orden superior.

 Ya veremos, que ¡con el tiempo maduran las uvas y se hacen tan viejas como andar a gatas!

Ignacio Gómez-PalacioComentario