CARTA A MIS NIETOS: LAS BUENAS NOTICIAS DE LA PANDEMIA

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Una pregunta y una respuesta polémica: ¿cuál es el lado positivo de la pandemia y de la época en que vivimos? Lo contesto con una carta que ya hace tiempo he querido dirigirle a mis nietos, a punto de entrar a la universidad, residentes en Toronto (consecuencia de la exportación de talento que continuamente hacemos los mexicanos, entristecidos de ver como nuestros hijos salen del país en busca de mejores oportunidades).

Queridos Pablo y Juan:

Años atrás, nadie planeó su vida inserta en una pandemia mundial. A ustedes les ha tocado vivir una época única en la historia, no sólo de un país, sino de la humanidad entera. Un momento trascendental en la vida de nuestro planeta. Me niego a pensar que su generación es desafortunada, pues no van a tener la libertad ni las oportunidades que nosotros los viejos tuvimos a su edad. Estoy convencido que se les presentarán muchas posibilidades, si se enfocan en como contribuir al progreso de la humanidad y no en lo negativo de los sucesos actuales. Como es usual frente a las malas noticias, éstas tienen su lado positivo. Por eso, listo lo que considero buenas noticias de esta pandemia:

·      Hoy sabemos, que sin importar la riqueza de un país, nadie es dueño del mundo ni de su futuro. Esto es un aspecto psicológico positivo. Con motivo del grado de comunicación que hoy tenemos, las desgracias de cualquier país brincan distancias y fronteras. Por ejemplo, un campo de refugiados hacinados, puede ser caldo de cultivo para enfermedades que se convertirán en plagas universales; y que lo mismo puede suceder con los animales y su relación con los humanos. Puede no parecer buena noticia, pero conocerlo sí lo es, ya que sin la información no hay solución posible.

·      Se abren grandes posibilidades de innovación en diversos sectores como educación, turismo, bares, restaurants, tráfico, arrendamiento inmobiliario, mejora de los sistemas inmunológicos en seres vivos y otros. Decía Einstein que en los momentos de crisis, la imaginación es mas importante que el conocimiento. Que mejor que la mente no viciada del joven para imaginar y crear soluciones.

·      La humanidad se ha percatado de la gravedad de la contaminación que afecta al globo terráqueo, cuando hace unos meses, países como China detuvieron la operación de sus fábricas y explotaciones y durante varias semanas tuvimos un mundo limpio.  Esto enseña que no puede dejarse al criterio de una persona decisiones fundamentales para todos, como fue el caso de Trump en 2017, al retirar a EUA del Acuerdo de París sobre cambio climático.

·      La pandemia es una realidad que puede repetirse. Los gobiernos y la industria farmacéutica se han educado a anticipar lo que en esta ocasión no previeron. Hoy están infinitamente mejor preparados en este tema que hace un año, lo mismo que los hospitales y profesionales de la salud.

·      La tecnología está desarrollando soluciones inimaginables. La presencia física a distancia está en proceso de ser perfeccionada. No comprendemos como participar físicamente en una reunión, sin estar presente, lo que es un campo abierto a la investigación y desarrollo. El caso de la telemedicina aún es difícil de aceptar, pero es una realidad.

·      Se ha planteado la búsqueda de soluciones, al hecho de que por primera vez la humanidad ha confrontado un problema mundial, con las limitaciones que arrojan el que cada país decida lo que le conviene, independientemente del daño que sus decisiones impliquen para el resto de la humanidad.

Queridos Pablo y Juan, con base en el conocimiento que van a adquirir de sus universidades, sumado a su imaginación y la que habrá de rodearlos, especialmente de otros estudiantes, su generación encontrará caminos y luces que hoy no podemos predecir, pero sucederán. Tengan la seguridad que sucederán. Hago votos porque ustedes sean ciudadanos conscientes involucrados en soluciones para beneficio de sus comunidades y el mundo. ¡No tengan miedo a pensar diferente!

Ojalá les sirvan estas palabras de su abuelo.

Ignacio Gómez-PalacioComentario